Razones por las que un banco puede rechazar una hipoteca
Como regla general, los bancos pueden negar un préstamo hipotecario por diversas razones, entre las más comunes se encuentran: un historial crediticio deficiente, deudas activas, ingresos insuficientes o la provisión de información falsa por parte del solicitante.
Cabe destacar que los bancos no siempre explican el motivo exacto de la negativa. Sin embargo, es posible analizar la situación financiera del solicitante para identificar las posibles causas.
1️- Mal historial crediticio
Al evaluar una solicitud de préstamo, los bancos analizan el historial crediticio tanto del solicitante como de los posibles codeudores. Incumplimientos como pagos atrasados, evasión de deudas o litigios relacionados con préstamos pueden afectar negativamente este historial.
Por ejemplo:
- Si un cliente ha tenido varios retrasos de hasta 5 días, su historial ya no será ideal, pero esto no siempre significa una negación automática.
- Retrasos prolongados o recurrentes pueden considerarse señales de riesgo y reducir significativamente las posibilidades de aprobación.
- En casos de impago total, donde se han tomado medidas judiciales, el banco rechazará la solicitud de manera definitiva.
¿Cómo solucionarlo?
Si los retrasos en los pagos no fueron culpa del prestatario, es posible corregir su historial crediticio presentando documentos justificativos, como:
- Un certificado médico en caso de hospitalización.
- Un comprobante del empleador sobre retrasos en el pago de salarios.
- Cualquier otro documento que respalde la causa del retraso.
Además, se recomienda verificar la existencia de posibles problemas que afecten el crédito, como:
- Retrasos en préstamos o tarjetas de crédito vigentes.
- Deudas por multas o impuestos pendientes.
- Procesos de cobranza judicial en curso.
- Registros de bancarrota.
- Litigios abiertos.
Mantener un historial crediticio saludable es clave para aumentar las probabilidades de obtener una hipoteca.
2️- Ingresos insuficientes
Para obtener una hipoteca, los ingresos del solicitante deben ser estables y suficientes para cubrir los pagos mensuales del préstamo sin comprometer su calidad de vida. Además, el prestatario debe disponer de dinero para cubrir gastos básicos como alimentación, mantenimiento de familiares dependientes, servicios públicos, impuestos y otros compromisos financieros.
Por ejemplo, si un cliente tiene un salario de $2,000 y el pago mensual de la hipoteca asciende a $1,600, solo le quedarían $400 para cubrir todos sus demás gastos. Como esta cantidad es inferior al umbral de subsistencia, el banco considerará que el cliente no tiene suficiente capacidad de pago y rechazará la solicitud.
¿Cómo solucionarlo?
- Incluir codeudor: Agregar un codeudor con ingresos estables puede aumentar la cantidad aprobada. El banco considerará los ingresos combinados para determinar la viabilidad del préstamo.
- Demostrar ingresos adicionales: Si el solicitante recibe ingresos por alquiler de propiedades, trabajos freelance o cualquier otra fuente, debe informar al banco y proporcionar documentos de respaldo.
- Ajustar los parámetros del préstamo: Para mejorar las posibilidades de aprobación, se pueden considerar opciones como:
- Buscar una vivienda de menor costo.
- Reducir el monto del préstamo aumentando el pago inicial.
- Extender el plazo de la hipoteca, lo que disminuirá el pago mensual.
Demostrar estabilidad financiera y una buena capacidad de pago es clave para obtener la aprobación del préstamo hipotecario.
3- Otras deudas
Un banco puede rechazar una solicitud de hipoteca si el cliente ya tiene múltiples compromisos financieros. Antes de aprobar un préstamo, la entidad evalúa si el solicitante podrá hacer frente a los pagos sin comprometer su estabilidad económica. Si la carga financiera es demasiado alta, existe el riesgo de que no pueda cubrir todas sus deudas junto con la hipoteca.
Por ejemplo, si un cliente tiene varios préstamos con otros bancos y posee dos tarjetas de crédito, podría estar destinando $900 al pago de sus deudas mensuales. Si su salario es de $2,000 y la cuota de la hipoteca asciende a $900, el total de pagos mensuales representaría más del 70% de sus ingresos, dejándole solo $200 para cubrir todos sus demás gastos. En este escenario, el banco considerará que la carga financiera es insostenible y rechazará la solicitud.
¿Cómo solucionarlo?
- Reducir la deuda existente. Pagar préstamos actuales antes de solicitar una hipoteca puede mejorar la capacidad de endeudamiento.
- Cerrar o reducir los límites de tarjetas de crédito. Aunque no se utilicen, los bancos las consideran una posible fuente de deuda adicional.
- Planificar con anticipación. La actualización del historial crediticio puede tardar hasta 30 días, por lo que es recomendable liquidar deudas con suficiente antelación antes de solicitar un préstamo hipotecario.
Mantener un nivel de endeudamiento equilibrado es clave para obtener la aprobación de una hipoteca y garantizar estabilidad financiera.
4- Información inconsistente o poco confiable
Los bancos verifican minuciosamente todos los datos proporcionados por el solicitante antes de aprobar una hipoteca. Cualquier inconsistencia o intento de ocultar información puede interpretarse como un intento de fraude, lo que resultará en el rechazo inmediato del préstamo.
Por ejemplo, si un cliente omite declarar algún préstamo vigente, el banco puede detectarlo a través de su historial crediticio y considerarlo una señal de riesgo, lo que llevará a la denegación de la solicitud.
¿Cómo evitarlo?
- Proporcione información veraz y completa. Asegúrese de declarar todas sus deudas, ingresos y otros compromisos financieros con total transparencia.
- Notifique a su empleador y familiares. Es posible que el banco realice verificaciones llamando a su jefe, al departamento de recursos humanos o a familiares cercanos. Informarles con anticipación evitará confusiones.
- Revise su historial crediticio. Puede solicitar un informe en agencias como Equifax para asegurarse de que no haya errores o deudas no declaradas.
- Mantenga una carga financiera manejable. Se recomienda que el pago de la hipoteca no supere el 50% de sus ingresos mensuales. Si tiene demasiados compromisos financieros, liquidar algunos antes de solicitar el préstamo puede mejorar sus probabilidades de aprobación.
Las políticas de crédito de los bancos pueden cambiar con el tiempo. Si su solicitud es rechazada, puede intentarlo nuevamente después de algunos meses, asegurándose de corregir cualquier problema detectado.
Recuerde que incluso Walt Disney fue rechazado 303 veces por distintos bancos antes de obtener el financiamiento para Disneyland. La perseverancia y una buena planificación financiera pueden marcar la diferencia.